El Hetero Perdido 2

Hola, quiero agradecer a todos las valoraciones sobre el primer capitulo y espero que los siguientes me sigáis valorando/comentando si os gustan.

Gracias

El Hetero perdido

Capitulo 2: La llamada

Óscar había dejado atrás el fin de semana en el que celebró su cumpleaños y donde vivió diferentes emociones, pasando por regalos, felicitaciones y el episodio del hotel. La mañana del lunes nadie hacía presagiar la gran tormenta que se avecinaba, y es que en uno de los descansos de la clase tras hablar con Lorena sobre la cita que tendrían esa tarde se desataría todo.

-Entonces ¿Quedamos hoy a las 17?-preguntó Lorena

-Si, después de comer voy a tu casa-continuó el

Había decidido pedirle que fuera su novia. Tras confirmar la cita el chico se levantó y se dirigió al baño.

Después de lavarse las manos le sonó el teléfono móvil, no esperaba ninguna llamada, miro en la pantalla. Número anónimo. ¿Quién le estaria llamando con un número sin identificar?- pensó en dejarlo sonar, quizás fue una confusión, tras parar la llamada volvió a sonar el teléfono con idéntico nombre, se produjo una segunda llamada, decidió cogerlo tal vez era alguien que lo conocía y lo estaba llamando asi por algo.

¿Si, quien es?-preguntó Óscar algo intrigado

-Buenos días, Óscar-dijo el interlocutor al otro lado del teléfono.

Óscar no logró saber quien era ya que parecía tener la voz distorsionada.

¿Quién eres?-volvió a preguntar

-Te llamo para agradecerte la gran noche que pasamos en el hotel

-¿En el hotel?-preguntó intentando hacerse el despistado

-Si, el hotel en el que amaneciste el sábado por la mañana

Así que fuiste tú-dijo Óscar

-Lo pasamos muy bien-comentó la voz anónima

-No pasó nada, porque yo no estuve con nadie esa noche!-dijo Óscar intentando aparentar seguridad en las palabras que decía.

-¿Estás seguro? Porque me vas a hacer que te refresque la memoria, Osquitar-amenazó la voz

Osquitar, detestaba que le llamaran así, ya no era un niño, sino un adolescente con la mayoría de edad recién cumplida.

-Voy a colgar así que déjame en paz.

-No cuelgues o te pesará

-¿Me estás amenazando?-preguntó Óscar

-No, simplemente te he llamado para agradecerte la gran noche que pasamos juntos, tienes unos pezones muy bonitos, aunque la tienes pequeña-comentó la voz en tono provocativo

Óscar bajó la mirada hasta sus pezones por encima la camiseta

¿Pezones?-dijo con voz entre baja y cortada. Y no la tengo pequeña-dijo tajante.

Óscar era muy tímido y desde hace ya algunos años atrás no se dejaba ver desnudo por nadie mas que no fuera su hermano mayor Martín, ni siquiera sus padres lo veían así.

-Quedamos esta tarde a las 5-le propuso la voz

-Esta tarde no puedo ya tengo plan, además no voy a quedar con una persona que no conozco ni se identifica al llamar.

-Sabes perfectamente quien soy, pero como intentas no recordarlo te voy a refrescar la memoria. Mira el móvil le ofreció la voz.

Óscar miró el móvil, recibió un mensaje multimedia, que constaba de una foto que nada mas ver hizo que sus ojos se abrieran como platos y se quedase paralizado no podía ser lo que estaba viendo

-¿Estás ahí, Óscar? Supongo que reconoces al de la foto-le preguntó de forma irónica

En la foto aparecía Óscar en esa cama de hotel completamente desnudo en compañía de otro chico que tenía la cara pixelada y que también estaba sin nada de ropa, en actitud cariñosa y de estar disfrutando

-Esto no puede ser!-dijo Óscar sorprendido tiene que tratarse de una broma

-No lo es, pero si quieres te enseño mas-dijo la voz

-¿Mas?-preguntó Óscar atemorizado

Volvió a recibir una nueva foto que abrió enseguida, aquella imagen terminó de hundir la moral del chico

En esa otra foto, Óscar tenía el pene de su acompañante cogido con dos dedos y la boca cerca y abierta se daba perfectamente a entender lo que vendría segundos después

¿Qué quieres, que buscas de mi?-preguntó un Óscar derrotado

Ven a las 5 de la tarde a esta dirección que te voy a poner y sabrás todo, quien soy, lo que busco y quiero de ti

-No puedo quedar a las 5, he quedado-repitió el chico

-Me da igual-dijo la voz en tono autoritario, no te he preguntado si puedes o no. Te lo he ordenado y sino vienes Lorena, recibirá esas fotos en su móvil y tu ¿No quieres eso, verdad?

Lorena, pensó en ella, que diría si lo viese en esas fotos desnudo, en una cama y con otro chico, todo se iría al traste

-No serás capaz-amenazó Óscar

-Claro que lo soy y lo sabes, así que procura estar a las cinco en la dirección que te voy a poner sino tu familia y amigos sabrán la verdad-dijo la voz cerrando la conversación.

Colgó sin dejar que Óscar le diese de nuevo la réplica.

Se quedó un par de minutos pensando quien podía ser el autor de aquella encerrona. ¿Qué quería de él?

¿Quién era?, seria algún compañero de la facultad, algún amigo, conocido del barrio, hasta pensó en la ligera posibilidad de que fuese Marcos, borró de su cabeza esa absurda idea hasta que un nuevo mensaje de móvil le sacó de esos pensamientos.

-Te mando la dirección de nuestro encuentro de esta tarde a las cinco, ponte guapo, ven andando y se puntual-le escribió la otra persona

Nada mas ver el mensaje metió la dirección en el google maps para ver la distancia y el recorrido, quedaba justo en el otro extremo de donde vivía. Cerró el mensaje miró la hora y comprobó que ya se había ausentado de la clase bastante tiempo, tenía que pensar en algo y rápido. Se incorporó a la clase con el resto de sus compañeros, incluida Lorena.

-¿Estás bien? Le preguntó ella al ver que había tardado y tenía la cara desencajada

-Em, si-dijo mientras pensaba en alguna excusa creíble.

-Que ganas tengo de esta tarde-añadió Lorena

-No vamos a poder quedar-soltó Óscar de forma tímida y compungido.

-¿Por qué?, preguntó ella sorprendida.

-No, me encuentro bien, acabo de evacuar liquido, como comprenderás en este estado no vamos a poder cenar esta noche

-Ahora entiendo tu demora y la mala cara que traes, estás blanco-dijo ella

-Si tu supieras-pensó mientras anotaba las anotaciones que cogía de las explicaciones del profesor.

Eran las 4 y 22 de la tarde y tras mirarse en el espejo para hacerse una ultima revisión, salió a la calle para terminar con ese asunto que le había amargado el día. Para el encuentro Óscar eligió unas deportivas blancas, calcetines del mismo color, unos jeans gris estampados y una camisa de color claro. Iba con algo de miedo no sabía que se encontraría ni a quien, siguió caminando con la esperanza de que no le pudiese reconocer nadie que le dijera a Lorena que lo había visto en la calle, se sentía mal por haberla mentido pero era necesario. Continuó caminando y comprobó en el google maps cuanto quedaba. Estaba a dos calles, menos mal que hacía buen tiempo para ir andando. Finalmente consiguió llegar al número de la calle que aquel extraño le había indicado, miró el reloj faltaban 6 minutos para las 5, paseó de un lado a otro del portal nervioso, agitado, con ganas de salir corriendo y abandonar aquella absurda idea, pero el sentirse amenazado le hizo pararse y pensar que era absurdo hacerlo.

-Todos se acabarían enterando-pensó en voz baja, volvió a mirar el reloj, eran las 16:58 miro el piso que era en el movil y llamo al telefonillo. Le abrió sin recibir respuesta, dentro del portal se percató de que había ascensor pero no funcionaba, subió los 6 pisos andando. Al llegar comprobó que la puerta del ascensor estaba entreabierta, ¿La dejaría él asi aposta con la intención de hacerle subir andando? Cerró la puerta del ascensor para que siguiese funcionando y después se colocó en la puerta de la vivienda cuando al llamar comprobó que colgado había un sobre con su nombre.

“Para Óscar con un 1 debajo”

Lo abrió y leyó el mensaje

La llave esta debajo del felpudo-ponía.

Óscar levantó el felpudo que estaba pisando para coger la llave que le daba entrada a la vivienda, una vez dentro cerro la puerta y se encontró en un diminuto recibidor que parecía una cabina de lo pequeño que era. El recibidor tenía un espejo de medio cuerpo y un pequeño mueble marrón con dos puertas en la parte inferior. Óscar volvió a coger, tras dejar la llave en el mueble, el sobre que estaba pegado en el espejo a su nombre.

“Para Óscar 2"

Abre las puertas y dentro encontrarás una bolsa de saco de basura y otro sobre a tu nombre”

Abrió las puertas del armario y efectivamente encontró una bolsa de saco de basura que encontró en su interior junto con el sobre que ponía

“Para Óscar 3”

Con la bolsa en la mano abrió el sobre y leyó su contenido.

“Desnúdate y mete la ropa y tus pertenencias en el saco, después lo vuelves a meter dentro del armario, una vez ya hecho todo te giras y abres la puerta que tienes a tu derecha pulsando la tecla verde”

No le gustó aquella orden, otra vez tenía que estar desnudo, pensó la idea de salir corriendo, pero eso provocaría que las fotos viesen la luz y quería saber que intenciones tenía esa persona con el, pronto lo averiguaría estaba a punto de llegar al final… o al principio de algo.

Finalmente se desnudó y metió su ropa y las pertenencias en la bolsa para después meterla en el armario y cerrarlo, se puso de pie frente al espejo volvió a mirarse y comprobó que estaba sufriendo una erección.

-Tranquilo Óscar-se dijo para si mismo.

Esperó que la polla volviera a su tamaño normal y entonces pulsó la tecla verde que le había indicado para pasar. Una vez dentro se encontró en una sala diáfana donde no había absolutamente nada mas que un nuevo sobre, avanzó hasta él y lo cogió

“Para Óscar 4 (y último)”

-Menos mal, era el último pensó. Lo abrió y leyó el mensaje que contenía.

“Ponte de rodillas con las manos en la nuca y cuenta hasta quince en voz alta con los ojos cerrados y sin girarte”

Dejó el sobre y se puso de rodillas con las manos en la nuca

-Acabemos con esto-dijo para acto seguido empezar cerrar los ojos y empezar a contar. Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis…

Mientras contaba por detrás aparecía la persona que lo había traído hasta allí

-... nueve, diez, once, doce

En ese momento comprobó que sufría una nueva erección que no pasó desapercibida para el anónimo

-Mierda!-dijo para acabar con la cuenta… trece, catorce y quince.

Se calló y durante unos segundos se hizo el silencio que rompió la otra persona.

-Bienvenido Óscar-le dijo por su espalda mientras le cogía las muñecas y le esposaba las manos a la espalda sin que Óscar pudiese esperarlo y mucho menos reaccionar a tal acción.

Desnudo y esposado Óscar no sabía que hacer, se encontraba paralizado por el momento, seguía teniendo la erección. Fue entonces cuando la otra persona le habló

-Puedes girarte, abrir los ojos y ponerte de pie-le ordenó

Óscar acató la orden y se puso de pie delante del culpable de su situación

-Me llamo Roque y tengo 38 años.

¿Qué quieres de mi y porque todo esto?-preguntó Óscar esta vez en un tono desafiante

-Te quiero a ti y al parecer no me ha costado nada conseguirte

-¿Por qué a mi?

-Porque desde que te vi aquella vez supe que tenias dentro de ti un alma sumisa

-¿Alma sumisa?-dijo extrañado para inmediatamente contestar, yo no soy sumiso-continuó Óscar

¿Estás seguro? No has parado de obedecer y de cumplir las órdenes al pie de la letra como se te ha indicado, además tu polla te delata.

Óscar la miró y vio que estaba en su máximo esplendor de hecho no recordaba haberla visto en ese tamaño alguna vez

-Te está saliendo liquido preseminal ¿Qué es lo que mas te esta haciendo disfrutar? ¿Estar desnudo delante de mi?

-Odio que me vean desnudo-contestó el

¿Estar esposado? Porque me imagino que no te habrán puesto nunca unas esposas.

-No-respondió

-Siempre hay una primera vez para todo

¿Qué quieres de mi?-volvió a preguntar Óscar

-Que seas mi esclavo-atajó Roque

¿Tu esclavo? Estás loco ni soy gay ni me van estas cosas, quítame las esposas ya y deja que me vaya

-Sh cálmate y déjame que te diga que el sábado en el hotel no parecía eso, disfrutabas muchísimo en la cama conmigo, hazme tuyo me susurrabas, gozabas como una perra en celo

-Eso es mentira-dijo retorciéndose por las esposas

-Sabes que no miento Óscar

-No voy a ser tu esclavo

-Muy bien en ese caso le mandaré las fotos a Lorena y a tus padres para que vean como su hijo disfruta en la cama.

-No, eh a ver por favor no mandes nada de eso mira si quieres podemos negociar.

-¿Crees que estás en condiciones de negociar? Mírate, desnudo y esposado-le recordó Roque

-Por favor si mi familia ve esas fotos…

-Son homófobos?- le cortó Roque

-Clasistas

Roque se rió

-Va a ser divertido entonces someter a un chaval de 18 años recién cumplidos cuyos padres son “homófobos” esto me puede servir para tenerte mas atado.

-Por favor no les digas nada, hago lo que me pidas pero por favor-dijo suplicante

-Ya estás haciendo lo que yo quiero ahora solo falta que aceptes tu nueva situación y tu condición de sumiso y mi esclavo-le propuso Roque cogiéndole de los brazos, acéptala, no te queda otra salida y tu polla ha hablado por ti

-No quiero-dijo con voz baja

-Vamos Óscar acepta, di que quieres ser mi esclavo

En ese momento y de forma subconsciente como si no fuese dueño de sus palabras Óscar pronunció la frase

-Quiero ser tu esclavo-sentenció

Como si hubiese sido hipnotizado Óscar comprobó a los pocos segundos lo que había dicho y entonces a modo súplica acabó de rodillas pidiendo a Roque que lo dejara ir.

-Ve hacía la pared-le ordenó

-Por favor!-suplicó Óscar

-Obedece le dijo-dándole una bofetada.

Óscar se dirigió al punto donde Roque dijo

-Sonrie

Óscar sonrió y Roque le hizo varias fotos, una de medio cuerpo, otra de perfil, de ambos lados, de cuerpo entero, se dirigió a Óscar y le quitó las esposas para repetir las instantáneas

-Se dice gracias Señor-

-Gracias Señor -repitió Óscar mientras Roque volvía al mismo punto de antes le indicó a Óscar varias poses, recto, de lado, de espaldas, de medio cuerpo, e inclusive le hizo una a cuatro patas.

Estaba perdido. Fue en ese instante cuando no tuvo mas remedio que aceptar su nueva condición de esclavo.

Después Roque le impuso las primeras normas a cumplir.

-Bien, escucha ahora te voy a decir las primeras normas a cumplir

-Uno, a partir de ahora me llamarás AMO o SEÑOR siempre

-Dos, como tu amo que soy y superior a ti me trataras siempre de usted

-Tres, siempre que nos veamos a modo de saludo me besaras los pies

-Cuatro, siempre que estemos solos y en lugares cerrados o permitidos para ello tendrás que estar completamente desnudo y depilado

-Porque quieres que siempre esté desnudo?-preguntó Óscar

-Porque te lo digo yo y porque los perros como tu no tenéis derecho a nada… y no me interrumpas cuando te esté hablando- le dijo golpeándole en la polla

-Ah, lo siento señor

-Cinco a partir de mañana, todos los dias, sin excepción, me mandarás nada mas despertarte un mensaje de texto diciéndome

“Buenos dias señor”

De este modo serás tu el que inicie la comunicación diaria que tendremos, entendido?

Óscar se quedó en silencio a modo de rebeldía, Roque le golpeó en la polla nuevamente

-Entendido?

-Ah!-gritó Si señor

-Sabes lo que pasará si no cumples con algo de lo que te acabo de decir?

-No, señor

-Castigo y tu no quieres que te castigue y que esto que tienes aquí colgando sufra las consecuencias, verdad? -Dijo golpeándole de nuevo

-Ah! No señor

-Entonces que tienes que hacer?

-Obedecer en todo lo que me ha dicho señor

-Recuerda que esta en tus manos ser un buen perro

-Lo intentaré señor

-Se que no te será fácil pero lo acabaras consiguiendo

-Gracias señor

Tras eso Roque le quitó las esposas a Óscar y lo liberó para que pudiese vestirse, y poder regresar a su casa, empezaba asi una nueva vida para Óscar, la mayoria de edad le habia traído un regalo, ser esclavo de un hombre que le doblaba la edad, lo que todo adolescente soñaba irónicamente hablando.

¿Qué sería lo siguiente que aquel hombre le haría hacer, pensaba mientras iba a su casa? Sea como fuere solo le quedaba una cosa

OBEDECER!

CONTINUARÁ