El repartidor de Glovo

Relató 100% real, me encanta divertirme…

Todo empezó con una fantasía que cada vez cogía más y más peso que es follar con un repartidor de delivery.

No tengo mucho tiempo Oda cocinar así que realmente abuso de Uber, Glovo…y cada vez que abría la puerta con cada pedido mi mente imaginaba una Puta situación morbosa.

No siempre…pero por alguna razón el 90% de los repartidores me ponían cachondo, en más de una ocasión miraba con cara coqueta y como mucho recibía una sonrisa como respuesta.

Con el tiempo de varios repartidores que veía más de una vez, uno me encantaba, Venezolano, unos 30 añitos, alto, morenito brazos tatuados…de esos malotes que me dejan babeando.

De tanto verle empezaba a bromear con el, estarás cansado, que tatuajes más bonitos, de donde eres?, como te llamas? le daba propina para que me recordara y con suelte volviera más (creo que funcionó), hasta que empecé a hacer las compras pesadas, me cuadró que viniera el 2 veces de las compras grandes de muchas que hice jjaja y le invitaba a entrar a dejarme las cosas si no le importaba “que me dolían los brazos de una caída” jajaja le invitaba a agua…

Hasta que cuadro la tercera compra, directamente al abrir la puerta el hizo el gesto de entrar a dejarla, supongo que lo daba por echo…y fue directo a la cocina

Yo: joo! Muchas gracias Mateo

Mateo: Nada muchacho, si ya te veo más a ti que a mi novia jaja me la paso fuera d e casa trabajando.

Yo: Que suerte la mía

Mateo: Eh? Suerte? Jaja

Yo: De verte más que tu novia

Mateo: y tú tienes novio?

Claramente se ha dado cuenta d EMI orientación aunque no soy un chico afeminado, mi apariencia es de osete masculino, tatuado…

Yo: Que va que va

Mateo: que suerte la mía

Yo me quede mirándolo mientras me reía con cara de no entender su respuesta

Mateo: Bueno Chaval me tengo que ir, hasta la próxima.

Me percaté de que estaba empalmado incluso diría que nervioso, lo acompañe hasta la salida y bueno…ahí empezó lo interesante, esa compra fue a la tarde, a la noche sobre las 21:00 suena el timbre y al abrir es Mateo…

Yo: Hey! He pedido algo y no me acuerdo jaja

Mateo: No lo que pasa es que acabo de entregar un pedido por aquí y quería pedirte el favor de ir al baño…

Yo: si claro pasa

Yo estaba haciéndome la cena y al salir del baño entra a la cocina y me pide un vaso de agua, la verdad es que lo notaba súper nervioso…

Mateo: gracias eh! Por cierto nunca te lo he dicho pero bonito piso

Yo: Gracias, ojalá y fuera mío y no d eslquiler

Mateo: si está la cosa jodida en Madrid

Lo notaba nervioso y no podía dejar d e bajar la mirada a su paquete mientras se tocaba de vez en cuando…o la tiene muy grande o la tiene muy dura…

Claramente el se dio cuenta y se creó una situación un poco extraña y me dice…

Mateo: puedo sacármela?

Me quede un poco desubicado pero la verdad es que ya estaba caliente y le tenia ganas…no le voy a decir que no!!!

Yo: sacarte el que?

De repente se saca la polla, QUE POLLA! No estaba circuncidada unos 18cm gruesa! Venosa y con el capullo casi fuera…que ganas

Me acerqué a él y empecé a masturbarlo mientras gemía…

Yo: joder que polla tienes! Que gorda…

En ese momento me coge del hombro y me empuja hacia abajo, ver esa polla en mi cara me puso a 1000, bien peludo, le metía mano por la camisa y ese cuerpo entre fornido de hacer ejercicio pero a la vez con carne pffff olía a limpio, claramente no había trabajado, había venido a por esto…

Me la metí poco a poco en la boca, y a manar tranquilamente…

Mateo: pfff que rico, que rico…que boquita

Mateo cada vez estaba más exitado hasta el punto que me Apollo en la pared y me follaba la boca hasta casi sin dejarme respirar…

Cada vez que levantaba la mirada o me escupía, o me daba un bofetón, me restregaba su polla o me reventaba la cara a pillados…y que pillazos…

Mateo: esto es lo que te gusta? Que te follen la boca como si fuera un coñito? Traga venga…

No dejaba de follarme la boca hasta que sentí como me corria la garganta! Tenía tanta fuerza que no pude sacarla hasta que el quiso, el solo gemía gemía y apretaba todo su cuerpo contra mi cabeza y su polla hasta el fondo de mi garganta…

Cuando la saco caí al frente con las manos ampolladas en el suelo, tosiendo, llorando y cogiendo aire como nunca…

El cabron no dijo nada, de levanto los pantalones, cogió su mochila y se fue, pero claramente con intenciones de volver…

La cosa cada vez fue más fuerte!