Primera sesión con mi nuevo Amo (relató real)

Este relato (real) trata de la primera sesión con mi nuevo Amo.

Nos conocimos por Grindr, yo hacia tiempo que buscaba Amo pero no lo encontraba y sin querer vi su perfil cerca y hablamos.

Me dijo que era dominante y que le gustaba el BDSM y acordamos quedar más tarde, la única condición fue que me pusiera unos suspensorios.

Salí temprano de la oficina y me fui a casa, mientras me cambiaba me surgían las dudas de si debía ir o no, había sido todo muy rápido y me gusta conocer más con quien voy a quedar.

Salí de casa y aunque me aviso de que llegaría tarde preferí ir a esperarle para que viera que era un buen esclavo y no le hacía esperar.

Estuve esperándole 45 minutos, ¡pero la espera mereció la pena! Llegó de frente y al verle se me aceleró el corazón, me dijo que le siguiera y entramos en el piso.

El piso era un estudio muy pequeño de Airbnb y en cuanto cerró la puerta me ordenó desnudarme (yo pensé que desperdicio de suspensorios haber ido a casa a por ellos para desnudarme desde el inicio) y me ordeno ponerme de rodillas para inspeccionarme, casi como si fuera un caballo porque me miro hasta la boca.

Una vez me hizo la revisión me ordenó ponerme otra vez los suspensorios (¡me encantó eso!) y que me subiera a la cama boca arriba y las piernas en alto enseñando y abriendo bien el ano.

En ese momento me empezó a azotar y dándome bien en el ano, hasta que me dijo que fuera contando hasta 20 y que le mirara siempre y así hicimos el me zurraba y yo contaba, cada vez me daba más fuerte pero yo no me quejé en ningún momento, de hecho me sentía encantado al haber encontrado a un Amo como Él.

Cuando se cansó y como el rabo se le había puesto súper duro me empezó a meter el rabo hasta los huevos, hacía mucho que no me sentía así, con arcadas tremendas pero esforzándome al máximo para darle el máximo placer.

Así estuvo un buen rato hasta que decidió follarme, yo inicialmente le dije que no (el primer no de la noche)porque no habíamos hablado de sexo (hacía mucho tiempo que nadie me follaba) pero el dijo que si, abrió un bote de popper esnifó y me ofreció pero le dije que no (segundo del día) que yo no tomaba drogas, y Él no insistió, pero si me metió el rabo y me hizo ver las estrellas y paró un poco, me comió un poco el ano y me puso un poco de lubricante y empezó a jugar dentro haciéndome ver las estrellas pero de placer.

Al rato esnifó un poco más de popper y yo ya estaba totalmente entregado a Él, solo deseaba darle placer en lo que el quisiera, vio mi cara de sumisión y me acercó el bote, al principio esnifé poco y con cuidado pero Él me tapó un orificio y me dijo aspira fuerte y lo hice.

Nunca mw había sentido así, con el calentón del popper en mi cabeza El ya me penetró sin cuidado y yo solo sentía placer y le quería más dentro y más fuerte, al estar abierto de piernas me obligaba a mirarle y verle su cara de placer me ponía todavía más sumiso y con ganas de recibir más, de vez en cuando iba parando y me daba más popper, hasta que se cansó de esa postura y se sacó el rabo de dentro para mi pena ya que en ese momento yo estaba disfrutando como nunca antes y gimiendo como nunca en mi vida (aunque no quiero hacer spoiler no fue la vez que mas disfruté ese día).

Pero como buen Amo no podía dejarme que yo disfrutara tanto y si quería disfrutar tenía que pagar por ello. Fue a la cocina, me hIzo quitarme el suspensorio pero me dijo que siguiera en la misma posición y empezó a darme en los huevos y en la cabeza del pene, el dolor era muy fuerte pero soportable, pero yo ya estaba totalmente entregado a Él y pensé que ya no le podría decir nunca más que no.

Pasado un rato en esa posición me dijo que me pusiera de pie con las piernas abiertas y las manos en la cabeza y así lo hice, cogió uno de los cordones de mis zapatillas y empezó a darme en los huevos, menudo dolor, el sentado en la cama y yo de pie, cada vez que me daba fuete en el huevo izquierdo el dolor me subía por encima del estómago y veía las estrellas del dolor, el derecho me dolía menos.

Estuvimos así un rato hasta que se cansó, se puso un condón de nuevo, me dio popper de nuevo y me dijo que me pusiera sentado en el extremo de la cama, que levantara el culo y me la metió de golpe aunque esta vez solo sentí placer y empecé a gemir como nunca antes y a sentirme totalmente suyo, por suerte mi rabo seguía atado porque creo que sino me habría corrido, era una sensación tremenda, quería más y más, el me daba fuerte y yo empujaba para que fuera más fuerte, era lo nunca visto para mi, nunca antes me había sentido así, entregado al mil por ciento, oyéndome pedir más y los gritos de placer de mi Amo que hacían poner más fuerza y más ganas en todo, pero una vez más mi Amo decidió que ya bastaba de placer y tocaba jugar un poco más con mis huevos.

Esta vez Él se puso de pie, me volvió a ordenar ponerme con las piernas abiertas y las manos en la cabeza, me dijo ahora vamos a contar hasta 50 y mírame a los ojos. Es difícil olvidar sus ojos y su mirada durante el tiempo que duró la tortura, el dolor era bastante grande pero sus ojos me dominaban por completo ( y todavía lo hacen sin estar a su lado, no los puedo olvidar, los tengo grabados en mi cerebro), pese a eso en un momento dijo que había que volver a contar (debí cerrar los ojos un instante) y empezó a contar de nuevo, aquí fue tanto el dolor que cuando llegó a 12 le dije que no podia más (tercera vez en la sesión) pero Él dijo que había que seguir y así lo hizo pero no llegamos a 50 (entre el dolor y el popper no se a qué número llegamos).

Cuando terminamos me hizo ponerme en la postura del embrión de yoga, pero levantando el culo para poder penetrarme mejor, se puso otro condón y yo esnifé una buena dosis de popper (demasiado) y de nuevo me la metió de golpe hasta el fondo, con una fuerza tremenda dándome otra vez un placer tremendo y deseando que aquello no acabara nunca y gimiendo y pidiendo más cada vez, disfrutando cada embestida, sintiendo todo su rabo dentro y oyendo sus gemidos, así durante un buen rato, momento en el que sus gemidos de placer fueron casi gritos al correrse dentro de mi.

La verdad es que cuando vi que se había corrido por un lado me alegré de haberle dado tanto placer pero estaba tan caliente y disfrutando tanto que me dio pena (aunque yo había ido para darle placer y cumplí con mi obligación).

Después de fallarme el tenia ganas de más, pero se demostró que había tomado demasiado popper y yo estaba mareado así que me dejo descansar, desatarme el rabo y tumbarme hasta la hora en la que me tenia que ir, evidentemente sin correrme y con la instrucción de no hacerlo (cumplida hasta el momento y con ganas de seguir cumpliéndola)

Por desgracia no vive en Madrid y aunque seguimos en contacto va a ser difícil quedar tan a menudo como me gustaría