Contenido 18+

18+ significa contenido Adulto. La vista del contenido en esta comunidad podría no ser adecuada en algunas situaciones.

Las publicaciones de esta página pueden contener imágenes, referencias o historias explícitas.

La ruleta de los azotes

Escrito por:

14-02-2010
996 palabras

No sé por qué acepté aquel trabajo. Supongo que por el dinero. O tal vez fuese el morbo... o la posibilidad de estar un mes en Amsterdam sin pagar un pavo. No lo sé. El caso es que allí estaba, dispuesto a entrar en una cabina del Barrio Rojo y a ser sometido publicamente por un tipo que no conocía de nada y que no hablaba mi idioma. Tal y como constaba en el contrato yo estaba desnudo, con correas sujetas a mi pecho y apretando mis huevos. Tambien llevaba un collar con una argolla detrás. Hans, el Amo, llevaba unos pantalones de cuero super apretado, correas cruzadas sobre su pecho y una gorra de cuero. Eso me tranquilizaba, en el contrato decía que no me podía follar pero yo no las tenía todas conmigo. Al ver que llevaba pantalones suspiré aliviado porque el paquete que marcaba era realmente grande.


Salimos a la cabina. El suelo estaba cubierto por una alfombra de color rojo y unas cortinas del mismo color ocultaban la puesta que daba acceso a la cabina. Allí habia una silla, un potro, una cruz de San Andrés y un tablero con un montón de material sadomasoquista. El cristal de la cabina daba directamente a la calle y tenía una rendija como las de las farmacias para que la gente metiese dinero. El último elemento que había en aquella cabina era una gran ruleta con castigos dibujados. Segun el contrato, la gente echaria dinero para que el Amo hiciese girar la ruleta y me aplicase a mí el castigo. Cada uno de nosotros se llevaba la tercera parte de lo recaudado y el tercio sobrante la empresa que nos contrató.


Me coloqué muy cerca del cristal, con la cabeza agachada en señal de sumisión, esperando captar público. Aquello no era facil porque era cerca de la 1 de la madrugada, aunque a pesar de ello pronto se acercaron una pareja de marineros, un viejo verde, un grupo de adolescentes y una señora de unos 40, con apariencia de ejecutiva. Los marineros hacian gestos de estar hablando del tamaño de mi polla, que les parecía pequeña. El viejo verde me miraba con mirada lasciva. Los chavales estaban señalando las distintas opciones de la ruleta mientras que la mujer se mantenia a la espectativa.


Los primeros que se animaron a poner los 30 euros que valía cada tirada fueron los marineros. Hans recogió la pasta, se fue junto a la ruleta y tiró con fuerza. Yo estaba de espaldas a ella por lo que solo supe lo que había salido por los gestos que empezaron a hacer los adolescentes, azotandose el culo con fuerza mientras se reian. Hans se sentó en la silla y me llamó. Me hizo ponerme sobre sus rodillas y comenzó a azotarme con el culo mirando hacia el cristal para que vieran que me pegaba de verdad. Y vaya si lo hizo. 50 azotes con su guante de cuero me dejaron el culo realmente...

Lee el relato completo Inicia sesión en Xtudr

La ruleta de los azotes

Xtudr, el chat esencial para los fetichistas gays, te conecta con miles de chicos en tu área que comparten tus gustos. Disfruta de la comunicación instantánea enviando y recibiendo mensajes.

Explora una forma rápida, sencilla y divertida de conocer gente nueva en la red de encuentros para chicos líder como Desconocido.

Con Xtudr, puedes:

- Crear un perfil con fotos y preferencias.

- Ver perfiles y fotos de otros usuarios.

- Enviar y recibir mensajes sin restricciones.

- Utilizar filtros de búsqueda para encontrar tu pareja perfecta.

- Enviar y recibir Taps a tus favoritos.

Regístrate en la aplicación fetichista y BDSM más popular y comienza tu aventura hoy mismo.

https://www.xtudr.com/es/relatos/ver_relatos_basic/13766-la-ruleta-de-los-azotes