Azotando al sumiso I

Me gusta adaptarme a las fantasías y peticiones de mi/s amo en los encuentros que he tenido.

Voy a contar el ultimo. Mi amo quería vengarse de una infidelidad o algo así de su novia o mujer, no sé exactamente, y me pidió que adoptase ese rol al llegar a su casa. Y así fue. El día que me dijo me presente en su casa, estaba prácticamente desnudo, con sólo un slip. Sin más me dijo que había sido muy puta y que si sabía que debía tener un castigo. Le dije que me lo merecía y que haría lo que me dijera. Pasamos a una habitación. Puso música, y me ordenó que me desnudara. Una vez desnudo, me dio unas braguitas. Me dijo que debía ponérmelas. Así hice. Subió la música, me ordenó que ofreciera el culo, a 4 patas, sobre la cama. Una vez así, vi que cogió un cinto. Había tres, de cuero, de diferentes anchuras. Y una correa, con mando de madera. Empezó a dar azotes, mas bien suaves. Iba contando y diciéndome que era muy guarra y que tendría mi mastigo. Lo que estaba haciendo era calentar el culo para poder luego azotarme bien. Al llegar a 20, paró y me bajó las bragas. Una vez con el culo al aire, sentí un dolor/escozor pues ya empezó a azotar duro. Desde mi derecha, abarcando cada azote a ambas nalgas. Iba contando, y a veces daba dos seguidos y otras espaciaba para que notase bien el azote. Noté que al llegar a 10 volvió a contar 10 y pensé que se había equivocado, pero me dijo que me había movido, y que si lo hacía repetiría el azote, y mas fuerte aún. Al llegar a 20, se puso a mi izquierda y repitió otros 20 de la misma forma. Mientras me azotaba, le insultarme, puta, guarra, zorra…. Cuando me había dado eso 40 primeros (que fueron alguno más ya que no puede vitar moverme alguna vez). Me dijo que me diera la vuelta. Me senté en la cama y frente a mi me puso su polla y me dijo que demostrara lo arrepentida que estaba y lo puta que era, así que me todo hacer una mamada, mientras el culo me ardía. Al rato de mamar, me dijo que parara y que volvería a azotarme. El proceso fue el mismo, aunque ahora cogía la correa. No sé si prefería ser azotado o que me pidiera mamar de nuevo , pues el culete empezaba a estar mas que rojo y cada azote dolía mucho. Tras otros 40, tuve que volver a chupar. Nueva parada y otro 20 con otro cinto., 10 por la derecha y 10 por la izquierda, que dijo que las dos nalgas tenían el mismo derecho a sufrir el castigo. Al acabar me dijo si quería probar una fusta que tenía. Me extraño que me lo pidiera, pero me gusto, ya que no habíamos hablado antes de ello. Total, como ya tenía caliente el culo y estaba muy excitado le dije que vale, pues no había probado nunca unos fustazos. Fueron media docena, pero vi las estrellas…

Tras eso, me dijo que debía acabar el trabajo y así que tuve que chuparle hasta que se corrió. Ah, se me olvidaba decir que tuvo puesto un condón desde el principio. Era con sabor, a fresa.

Así que así acabó ese encuentro, le devolví las bragas, me vestí y me fui con el culo tan caliente como yo mismo aún estaba