SOMETIDO EN EL INSTITUTO I

Desde primaria me habían hecho bullying por mi conducta afeminada, digamos que la mayoría de los insultos y burlas solían venir del mismo grupo de chicos “guays” los que practicaban fútbol y solían ser guapos, atléticos, musculados y gustar a todas las chicas (y algunos chicos, como yo). Otra buena parte de las burlas venían de otro sector llamados los “canis” conocidos por su conducta violenta, su poco respeto a las normas y su odio a los gays.

Con el paso de los años la intensidad del bullying fue variando, volviéndose más física.

Roger, uno de los chicos más atractivos que he conocido, un auténtico macho dom, solía tocarme en culo delante de todos y al ver que no podía controlar la excitación se ponía a chillar:

- Mirar, a la maricona le gusta que me toquen el culo ahaha!

Todo el grupo de machos que siempre le envolvía se puso a reír mientras me insultaban. Siempre que pasaba eso me encerraba en el baño, con una erección incontrolable y sin entender porque me excitaba una situación tan humillante, y con una sensación extrema, fisiológica, comenzaba a masturbarme hasta que me corria como nunca en el baño.

Continuará …